domingo, 13 de marzo de 2011

Dios castiga y no a palos

Tanto tiempo te estuve esperando
años tras años sin parar
buscaba a un hombre mayor
que me supiera conquistar.

Quería que no fuera muy alto
de cabellos y ojos castaños
como Fernando González
el tenista que me ha enamorado.

Lo primero que pedía era
que mi hombre fuera trabajador
también atento y cariñoso
y ojalá no fuese fumador.

¡Ay chiquita mía! de mucho regodearte
te quedarás con lo peor
decía una muy buena amiga mia
que tenía toda la razón.

Meses después encontré a un hombre
cinco años menor que yo
brazos fuertes, rubico, ojos claro
que me ha llevado a la perdición.

Es formal, atento y muy caballero
pero le encantan los vicios y el juego
¿Qué relación guarda
con el hombre de mis sueños?

¿Querías a un hombre trabajador
y además que te diera toda su atencion?
¡Ay chiquita mía! Dios castiga y no a palos
pero así es el amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario